Cuando la tormenta política parecía empezar a amainar en Venezuela, una noticia inesperada la reavivó de nuevo.
Las fuerzas de seguridad del presidente Nicolás Maduro arrestaron y acusaron de terrorismo a Roberto Marrero, jefe de despacho del autoproclamado presidente Juan Guaidó.
Este jueves, Guaidó calificó de "secuestro" la captura de su colaborador más cercano y repitió que Venezuela vive bajo "una dictadura".
El arresto de Marrero, junto a su escolta Luis Alberto Páez Salazar, reactivó las denuncias de la oposición y suscitó la condena de Estados Unidos y otros países que reconocen a Guaidó como presidente interino del país.
También aumentó el temor de que pueda ser el inicio de una escalada que desemboque en la detención del propio Guaidó.
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